Impulsada por el aumento del transporte aéreo de pasajeros y las transformaciones que demandará el Campeonato Mundial de fútbol de 2014, la presidenta de Brasil, Dilma Rousseff, firmó ayer el contrato de concesión para la construcción y operación del primer aeropuerto del país, en Natal, que fue entregado al consorcio privado Inframérica, integrado por la argentina Corporación América y el grupo brasileño Engevix.
"Vamos a fiscalizar y asegurar que Brasil mejore cada día más, y tengo la seguridad de que quien va a contribuir con nosotros es la iniciativa privada", señaló la mandataria, en un acto sobre la pista -ya construida con fondos públicos- del futuro aeropuerto internacional São Gonçalo do Amarante, un proyecto demorado desde 1997.
Allí, junto a la gobernadora del Estado de Río Grande do Norte, Rosalba Ciarlini, y al ministro Wagner Bittencourt, titular de la recientemente creada Secretaría de Aviación Civil, estuvieron también el presidente de Engevix, Gerson de Mello Almada; el presidente de Corporación América, Eduardo Eurnekian; su vicepresidente, Martín Eurnekian, y el presidente de Aeropuertos Argentina 2000, Ernesto Gutiérrez.
En agosto pasado, Inframérica ganó la adjudicación para la construcción y operación de esta terminal por 28 años, al ofrecer pagar una licencia por unos 95 millones de dólares (tres veces más del mínimo establecido por las autoridades), y con una propuesta de inversión de US$ 360 millones en los casi tres años que tomará levantar el aeropuerto. Deberá estar listo para principios de 2014, a tiempo para el Mundial de fútbol, en el que Natal oficiará como una de las 12 ciudades sede.
Con un tráfico aéreo de pasajeros que saltó de 33 millones en 2003 a 77 millones el año pasado, el gran temor del gobierno es que el megaevento futbolístico se vea empañado por un colapso en los aeropuertos, que ya sufren constantes problemas de demoras e infraestructura.
"Este es un acontecimiento muy importante para la Corporación América, porque implica el ingreso a uno de los mercados más importantes del continente. Toda nuestra experiencia y capacidad en la administración y operación aeroportuaria, que nos ha convertido en el primer grupo privado en el mundo en esta especialidad, será volcada en el mercado brasileño", dijo Eduardo Eurnekian, cuya compañía administra hoy 48 aeropuertos (35 en la Argentina y el resto en Uruguay, Perú, Ecuador, Italia y Armenia).
Infraestructura
La de Natal es la primera experiencia en privatización de un aeropuerto de Brasil y sirve como modelo para las otras tres que el gobierno de Rousseff pretende implementar en los próximos meses. Las otras tres terminales cuya gestión será privatizada son los aeropuertos de Guarulhos y Campinas, ambos en las afueras de San Pablo, y en Brasilia. Corporación América tiene la mira también en esas licitaciones, así como en privatizaciones de autopistas y otros proyectos de infraestructura.
Fuente: La Nación (Argentina)
Autor: Alberto Armendariz
No hay comentarios:
Publicar un comentario