Los trabajadores de la compañía española Iberia comenzaron ayer a cumplir la mayor huelga de su historia contra un plan de ajuste que prevé el despido del 19% de sus trabajadores, 3.807 personas, de los 20.000 del total de su personal. Los sindicatos denuncian que se trata de una maniobra para entregar la empresa a British Airways con la que está asociada Iberia en la International Airlines Group desde su fusión en enero de 2011. Por eso, durante la protesta en el aeropuerto de Barajas se corearon consignas contra el “desmantelamiento” de Iberia por parte de la “piratería inglesa”.
La medida de fuerza se realizará en tres semanas, 15 jornadas de paro, y llevará a la cancelación de 1.200 vuelos anunció la compañía. Los principales sindicatos de la compañía convocaron a tres series de cinco días de huelga del 18 al 22 de febrero, del 4 al 8 de marzo y del 18 al 22 de marzo.
Ayer por la mañana los trabajadores en paro protagonizaron numerosos incidentes en la terminal internacional número cuatro del aeropuerto internacional de Barajas, que esta monopolizado por Iberia.
Se produjeron choques en medio de una enorme revuelo que también afectó a numerosos pasajeros que querían encontrar vuelos que reemplazaran a los 81 cancelados. Los trabajadores en conflicto utilizaron sus automóviles para bloquear las instalaciones del aeropuerto, lo que originó un gran caos circulatorio. Además se anularon 20 vuelos de Iberia Express y 55 de la subsidiaria nacional de Iberia, Mare Nostrum. El 85% de los pasajeros afectados fueron recolocados en otras compañías, anunció Iberia. Cinco huelguistas fueron detenidos por los policías. Hasta el viernes serán anulados 415 vuelos. También quedaron afectados 807 servicios de tierra de otras compañías asociadas con Iberia.
El vuelo de Iberia 6845 que debía llegar a Buenos Aires a las 20.20 de ayer fue cancelado. También fue cancelado el que salía de Ezeiza a las 14.30.
Clarín intentó conseguir información sobre el resto de los vuelos y cómo habían sido programados pero fue imposible comunicarse con los números de atención al cliente en Buenos Aires durante la tarde de ayer.
“La huelga tiene un seguimiento de casi 100%”, aseguró José Carrillo, responsable del sector aéreo del sindicato Comisiones Obreras. “Ni un piloto, tripulante, trabajador de asistencia en tierra, técnico de mantenimiento o administrativo que no tuviera servicios mínimos ha acudido hoy a sus puestos”.
El gobierno de Mariano Rajoy instó a la dirección y a los trabajadores a desbloquear pronto la situación. “Les pido que lleguen a un acuerdo lo antes posible, porque nuestro país está viviendo una crisis económica y cualquier medida que altere de forma importante la comunicación de las personas está afectando a la economía y a todos los españoles”, exigió la ministra de Fomento, Ana Pastor.
Fuente: Clarín
Autor: Juan Carlos Algañaraz
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